Atasco de fregadero grave: qué no hacer y consejos para evitarlo

El fregadero de la cocina no traga nada de agua y es imposible usarlo. Cuando ocurre esto, lo más probable es que nos encontremos ante un atasco de fregadero grave. 

¿Qué no debes hacer si tienes un atasco de fregadero grave?

Si buscas en internet opciones para solucionar un atasco, encontrarás más de una. Pero ¿son las más recomendables? La respuesta es no. Sobre todo, cuando la obstrucción es grave, los remedios caseros pueden incluso empeorar el problema.

Lo mejor es que no utilices la zona y llames a un profesional en desatascos de tuberías para que te ayude.

Estos son los métodos que debes evitar si sufres un atasco de fregadero grave:

• Usar mezclas caseras. Un clásico que encontramos en la web. Por ejemplo, verás que se recomienda unir vinagre y bicarbonato o agua caliente y lejía para después verterlos por las cañerías. En la mayoría de casos no suele funcionar, ya que no soluciona el origen del atasco. Si este es muy complejo, incluso puede que precises una inspección de tuberías.

• Apostar por el aceite para desatascar. Nada más lejos de la realidad. Al entrar en contacto con material frío, este se solidifica y puede producir atascos complejos de resolver.
  
• Verter sosa cáustica. ¡Error! A veces, se vende como desatascador, pero debes tener en cuenta que se trata de una sustancia que produce reacciones químicas que pueden dañar el conducto.

4 consejos para evitar un atasco de fregadero grave

La mejor manera de librarse de un atasco es la prevención. Aquí vamos a darte algunos consejos básicos, pero que en el día a día, a veces olvidamos aplicar:

1. Coloca una rejilla en el fregadero. Algo esencial para que los residuos sólidos no se cuelen por las tuberías. Es tan fácil como acudir a tu ferretería de confianza y comprarlo.
2. No arrojes aceites usados o disolventes. Esto puede generar graves atascos, ya que si se mezclan con jabón suelen formar un tapón muy duro dentro de las tuberías.
   
3. Retira los restos de comida antes de poner los platos en el fregadero. Al terminar de comer, hay quienes colocan la vajilla en el fregadero sin tirar los restos a la basura.
   
   

¿Cómo desatascar un fregadero de cocina muy atascado?

• Retira el agua acumulada. Usa un cubo o una esponja para vaciar el fregadero y poder trabajar con comodidad.
• Sella el rebosadero. Cubre el orificio del rebosadero con cinta o un trapo para que la ventosa haga vacío.
• Prueba con una ventosa. Coloca la ventosa sobre el desagüe, añade un poco de agua caliente para cubrir la goma y bombea 15 o 20 veces. Repite el ciclo dos o tres veces. Es el método doméstico más seguro y suele funcionar cuando el tapón está en el sifón.
• Limpia el sifón. Coloca un cubo bajo el sifón, desenróscalo a mano, retira restos sólidos y vuelve a montarlo ajustando bien las juntas. Aprovecha para enjuagar con agua caliente y comprobar que no pierde.
• Usa un cable desatascador corto si hace falta. Introduce el muelle con suavidad por la boca del desagüe hasta notar el tapón. Gira sin forzar para fragmentarlo y retira los residuos con el cable. Si el atasco se encuentra en el tubo de la pared, mejor no insistir para evitar dañar la instalación.