Pozo ciego o fosa séptica: ¿cuál es la diferencia?

Incluso el propio Diccionario de la Real Academia Española (RAE) usa la misma definición para los dos conceptos: «pozo para depósito de aguas inmundas que se hace junto a las casas, cuando no hay alcantarillas». Sin embargo, se trata de dos sistemas diferentes de tratamiento de aguas residuales, que incluso cuentan con normativas legales distintas.

Lo que sí tienen ambos en común es que se encuentran en zonas rurales o aisladas que están desconectadas de la red de saneamiento público.

Diferencia entre pozo ciego y cámara séptica

• La fosa séptica cuenta con varios depósitos, pero el pozo negro solo con uno. El primero sirve para contener las aguas negras que se generan en una vivienda. El segundo tiene como objetivo almacenar los restos sólidos.
• Las fosas sépticas son impermeables, a diferencia de los pozos ciegos. Esto impide que los líquidos salgan del depósito residual.
• Los pozos negros suelen ser más pequeños que las fosas sépticas, tienen menos capacidad de almacenar aguas residuales.
• Las paredes de los pozos ciegos suelen estar fabricadas de ladrillo. La parte líquida que llega al depósito se filtra por las paredes y las sustancias sólidas se descomponen por acción bacteriana.

¿Se puede cambiar un pozo ciego por una fosa séptica?

Debido a las desventajas que presentan los pozos ciegos y, sobre todo, la contaminación ambiental que pueden suponer, se han prohibido en muchos lugares. Por tanto, es recomendable, incluso obligatorio depende de la zona, cambiar un pozo ciego por una fosa séptica, si cuentas con uno.